Cómo hacer que tu perrito huela bien

Nos encanta disfrutar de la compañía de nuestros perros; con su calor y mimos son capaces de mejorar nuestro estado de ánimo y alegrar nuestros días. Pero es común que de vez en cuando presenten olores que no son tan agradables. La buena noticia es que puedes tomar algunas medidas para evitar el mal olor de tu mascota. En este artículo te contamos cómo hacer que tu amoroso perrito huela siempre bien.

Busca el shampoo adecuado

Asegúrate de utilizar jabón o shampoo específicos para perros para el momento del baño. Si usas productos para humanos, corres el riesgo de irritar su piel y provocar malos olores. En la actualidad puedes encontrar productos específicos para cada tipo de pelaje, e inclusive existen productos para perritos con alergias, o que necesitan algún tratamiento especial en su piel. Consulta con tu veterinario cuál es el adecuado.

Sécalo bien

Después del baño es importante que seques muy bien a tu perro. La mayoría de canes le tienen miedo al sonido de un secador eléctrico, por lo que te recomendamos utilizar toallas para secarlo. Si el día está soleado, puedes aprovechar para dar un paseo y que así tu amiguito termine de secarse. No te preocupes si se revuelca en el suelo, es un comportamiento normal después del baño, por eso cepíllalo luego del paseo y evita que la suciedad
que quede entre sus pelos.

Fíjate en sus patitas

El mal olor en las patitas de los perros es más común de lo que crees.
Ellos expulsan su sudor a través de las almohadillas que tienen en sus extremidades. Si detectas que el mal olor proviene de esta zona, te recomendamos limpiar cuidadosamente sus patitas. Usa un pañito húmedo para bebé y limpia con delicadeza entre sus almohadillas. También asea la zona durante el baño y recuerda darle un buen secado. Si el olor persiste, lo mejor será que acudas a tu veterinario, quien podrá determinar la causa y darte una solución.

Limpia su cama y sus accesorios

Si después de bañarlo y limpiarlo el olor persiste, es momento de poner atención a la cama y accesorios de tu amiguito. Limpia sus cobijas, su ropa y sus juguetes; puede ser que aquí se esconda la fuente del mal olor.